Lo que ahora se vive en Mérida, alrededores y más allá, no tiene parangón, momentos de ferias y fiestas, -la ciudad debería estar todo el año de feria- para que la quieran, la maquillen, tal y como ahora mismo tapan huecos, quitan malezas, hasta barren las calles, colocan luminarias, arreglan fachadas del centro histórico; alguien apunta: "hombre pero es que esta gente del gobierno mesmo viven en permanente fiesta"