Momento
íntimo de los toreros, a partir del cual ya no hay marcha atrás. El mozo de
espadas le coloca el añadido, la castañeta, símbolo por el cual se reconoce al
torero que ya puede partir hacia la plaza. En la imagen se puede ver a Ángel
Escobar, conocido como “Bola de Nieve”, llevar a cabo esta operación con su
jefe de filas, César Girón, a quien se lo recomendó Fernando Gago. El primer
día que le vistió, para su debut en Caracas, no tuvo otra ocurrencia que recomendarle
a su matador que sus compañeros de cartel, Diamante Negro y Joselito Torres
“eran gente fregada, no venga a tirar línea”, a lo que su jefe le contestó: “No
jile negro, nunca he tirado línea. Siempre me quedo más quieto que un poste”.
En la última corrida que toreó le lanzó las orejas que había cortado, también
las últimas de su carrera, advirtiéndole que las guardara para siempre... Avance
Taurino p. 59, 19/03/24
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