La expectativa por ver por
la Tv a JE Colombo y a AR Rey toreando en México, hizo que muchos, muchísimos
estuviésemos pegados en la tele.
Estamos en Venezuela y el
internet, el bueno, el veloz vale
dinero, no obstante pudimos ver la apertura de la Plaza México y la programada
en Mérida, Yucatán.
En la de más aforo del mundo,
se corrieron toros ligeros de carnes, de poca cara, desmochados de pitones, sí
esos que ahora los veedores de las
figuras del toreo van a las dehesas, los escogen, los acomodan, -lo hacen por estos lados-
En la otra corrida, la de Mérida, se jugaron toros de verdad con cuajo, respeto en sus cabezas y la edad por arriba de los 4 años.
En la plaza México, la corrida no funcionó como era el pensado, el genio del malo de un par de toros y para completar, la espada se cargó la corrida que se creía triunfal.
La apertura de la Plaza México, sería la noticia, pero no, el acontecimiento que inunda los medios, portales, es que Roca Rey, escuchó los tres avisos, toro vivo a los corrales, en la mismísima Plaza México y en corrida televisada
No pasa nada, Roca Rey es la gran figura, no pierde nada, y pronto le veremos otra vez por el gigante coso. Imaginemos por un instante que este desliz le aconteciera a un venezolano acá en su tierra…
La otra información es la de JE Colombo, que se topó en la plaza de toros de Mérida, según algunos con toros contra estilo, pero lo real, fue que por allí se lidio un autentica corrida de toros con todas las barbas; para mi concepto el joven torero estuvo bien en banderillas, ejecuto una faena bulliciosa, efectista ante un toro nada fácil, perdió al menos una oreja, pues el fusil, llave que tarde a tarde le abre puertas, está vez el sudor le jugó una mala pasada mojando la pólvora.
Por acá en los grupos de whatsapp, críticos muy importantes indicaban: “Colombo no tuvo nada asentado en el segundo toro” y otro, “Colombo con ganado a contra estilo en Mérida lucio por momentos ligero de pies y atropellado”
Estás tardes sirven de reflexión para los que acostumbramos a ver a JE Colombo y a R Rey salir por las puertas grandes.
Acostumbrados a ver solo el derechazo, el natural, el cambiado por la espalda... y olvidamos aquello, que todos los toros tienen su lidia. El oficio, la lidia por bajo, el toreo por la cara, el de pitón a pitón, el de aliño, hoy dìa ya no se ve aquel torero bregador, el dominador...
Este es el torero moderno. Pero ver a un Morante o aun Ferrera desempolvar viejas suertes o lidiar un marrajo con muletazos de castigo por bajo, de pitón a pitón, sacando la muleta por arriba de las cabezas para después doblarse y castigar por bajo, metiéndose a los costados, punzando con la punta de la espada los costillares o toreando por la cara, es cosa curiosa de esos toreros considerados raros…
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