VALENCIA. Ferrera y Fandiño se repartieron cuatro orejas ante reses anovilladas

La Plaza lucía imponente con una luna de lluvia, En los accesos agentes de la Guardia Nacional impedían la entrada de menores de edad a la plaza, aduciendo una medida de tribunal

Cuando el toro falta...

Por: Cesar Dao Colina. Foto A G Soteldo LA AUSENCIA del toro hecho en el arenal de las plazas, con trapío, estampa, lámina, y edad, si se quiere colocar este atributo de último, convierte el espectáculo en una noria de falsedades. Falsedad que se entroniza cuando se suman la falta de casta y raza...cuando se adiciona, como lanza de oprobio, la mansedumbre y la falta de bravura. Esto nos entristece; nos duele, nos hace perder hasta la sana reflexión. Esto fusila la fiesta... y nos impide hacer crítica, crónica o relato, en este caso, como ayer en la noche sucedió en la plaza de Toros Monumental de Valencia. Reconocemos esfuerzos, sudores, denodadas y francas urgencias...!


Ferrera...

 
¿CÓMO hilvanar unas líneas cuando un matador de toros como Antonio Ferrera, decidido, entusiasta, arrollador y rico en triunfos se topa ante un género bovino ayuno de cara, pecho y culata, como el lidiado ayer en la pagoda valenciana?

No les criticamos sus dos orejas; no, porque su deber era torear los chotos de los bolillos.

Hubo contratiempos, muchos, que marcaron la vereda de lo que no fue y debió ser. Más, su capa, el tercio de banderilllas, y su labor muleteril deja nota aprobatoria.

Fandiño...

 
EL diestro de Orduña es un torero recio, serio, que le imprime hondura a sus lances y pases. No lleva engaños para adornar de truculencias sus faenas, que, en cada muletazo, deja un trazo definido, cargado de verdades; verdades que se arrebujan en sus naturales llevados hasta allá, dejándolos rematados en la cadera para bordar los forzados y pases del desdén.

Dos orejas por igual... como igual es el juicio de la crónica. Se arrima como un león para entonar el himno del Toreo Honrado que descansa en la base más pura de la torería: la redondez del temple y el mando.

El Califa...

Tiene valentía, casta y raza el coleta de Maracay, quien, estando acertado y lucido en banderilllas, le cupo lo peor del encierro emparchado por (4) toros de San José Bolívar y (2) de La Cruz de Hierro... los de San José, (5) rechazos, en primera instancia por la autoridad taurina. Suspender, era grave, pero sancionar es una obligación tácita. La plana se puede corregir.