Giovanni
Cegarra. Mérida Venezuela. La Fiesta Brava en la Región Andina Venezolana
y por ende, en Mérida, Estado Mérida, está sembrada con buenos cimientos, lo
que indudablemente la reafirma como "La
Cumbre Taurina de América" y por mucho que pudiesen inventar y
conspirar quienes la adversan, jamás podrán fracturarla, como ello quisieran.
Una prueba fehaciente
del respeto al arraigo taurino andino merideño venezolano, quedó plasmado, una
vez más, el pasado fin de semana, en la propia Plaza de Toros "Román Eduardo Sandia"
de Mérida, en el Concierto de Bandas de Rock regionales, nacionales
internacionales, que tenía ribetes antitaurinos, por lo que existía honda
preocupación entre taurinos por la posibilidad de que los "antis" pudieran
ocasionarle daños tan igual como ha sucedido con el Nuevo Circo de Caracas pero
"nunca falta Dios"
y se quedaron "con los
crespos hechos", les falló el poder de convocatoria, no
hubo la respuesta esperada por parte de los supuestos seguidores de este tipo
de música con ínfulas antitaurinas.
La Plaza de Toros
Monumental "Román
Eduardo Sandia" de Mérida regentada por la Junta Administradora
de COREALSA, abre sus puertas no solo a la actividad taurina sino a otras de
corte religioso, recreacional, cultural, deportivo, musical, médico
asistencial, cuya organización empresarial siempre ha respetado, la
esencia que la vio nacer hace 45 años, la Fiesta Brava, sin distingo de clase y
posición, por lo que el trastazo que se llevaron los del Concierto de Rock con
ribetes antitaurinos, en el que gastaron lo imaginable en publicidad, es la
clara demostración a la vista de todos, que Mérida es una ciudad cuyos
habitantes saben y hacen respetar su idiosincrasia, en la que consolidada está,
duela a quien duela, su afición taurina por excelencia
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