Con dos orejas como premio al rejoneador Pablo Hermoso se cerró la tercera del abono de San Sebastián, hasta el momento con sus trofeos es el triunfador de la feria, ahora sólo falta si lo premian, porque en una oportunidad el rejoneador merideño José Luis Rodríguez era el triunfador a ley y se lo negaron.
Said Cárdenas
Gráficas: Oscar Medrano
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| R.Orellana perdio los torfeos por la espada |
La tercera del abono de la Feria de San Sebastián tuvo los matices típicos de una corrida de toros, un encierro bien presentado, con presencia, lámina y trapio, pero, como todo en el toro no hubo tela para cortar, los astados y deslucidos de comportamiento dejaron con las ganas a los aficionados de disfrutar de una gran tarde.
El torero merideño Rafael Orellana ataviado de un traje azul marino y oro nada pudo hacer con el primero de la tarde, un toro manso y con peligro al cual se le fajó como torero lidiador y dedicado a una dura profesión.
Bregó con el toro difícil y complicado en embestidas para sacarle lo mejor, porfió el tovareño, pero, se le negó el astado, se entregó y se le arrimó a Festivo el 662 de la ganadería del Paraíso de Colombia y sufrió una voltereta, se repuso del percance y al final sin aliviarse y buscando matar al toro como lo mandan los cánones pudo dejar un espadazo que culminó con su primer drama.
En el segundo Rafa, lidió a Bullidor, el 88 de 446 kilos que le permitió a los aficionados ver ese concepto torero de Orellana que se entregó para mostrar el temple y el mando que lo tiene en Venezuela como el líder del escalafón, fue prefundo Orellana, estuvo superior al toro, al final con la espada falló y se le fueron los trofeos con un sabor amargo del cual sólo queda reponerse en sus próximas actuaciones.
El debutante Javier Castaño nada pudo hacer con un lote complicado que lo comprometió y lo hizo buscar el camino para agradar a la afición, en el primero de su lote Alcahuete el 89 de 460 kilos con la capa no pudo pararle porque fue un toro abanto y sin fijeza, con la muleta salió con una banca en su mano, se sentó e inició la lidia, el toro paso en sus muletazos por alto en cuatro ocasiones y luego le cambió los terrenos, en los medios el toro se le rajo y todo quedó en ganas porque no dio otra posibilidad, el cornupeta que se rajó y luego se fue por la calle de las amarguras el español la fallar con la espada y no poder con el descabello cerrar su actuación.
Con el segundo tuvo mejor suerte Castaño, el toro tuvo un poco más de acometividad, embistió y fue franco, le aprovechó el español y agradó a los tendidos, lamentablemente el toro Algarrobo fue mal llevado al burladero uno del tercio de matadores y cuando remató se partió el pitón derecho y fue enviado a los corrales reglamentariamente por esa lesión. En sustitución lidió a Arisco el 370 de 550 kilos uno de los sobreros, nada le dio este toro para el disfrute y acabó su actuación sin trofeos en San Sebastián.
El rejoneador
Pablo Hermoso de Mendoza en la segunda tarde de presentación llegó con el ambiente en contra, en su primera actuación no agradó porque fue corto de repertorio, no dejó nada para el recuerdo, en el primero de ayer Farandulero el 139 de la ganadería de Rancho Grande su presentación en San Cristóbal era sin pena ni gloria.
Por fortuna en el segundo se pellizcó el español y con Tinajero el 149 de 455 kilos derrochó parte de su tauromaquia que lo acredita como uno de los mejores rejoneadores, se justificó Mendoza y lidió en gran forma al toro para cortar dos orejas y ser el triunfador de la tarde.
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