Especial. Celebraba la salmantina localidad
de Ledesma el último de sus festejos taurinos programados en el Corpus 2014. En
tarde nublada y fresca se lidiaron novillos de Antonio Palla por el venezolano Manolo Vanegas y los salmantinos Alberto Escudero y Alejandro Marcos, quienes debutaran con picadores en este mismo
coso dos meses atrás.
Abrió
plaza Manolo Vanegas frente a Trianero ejecutando dos largas
cambiadas de rodillas, para continuar con un vibrante saludo capotero rematado
con una media y una revolera en la misma boca de riego. Más voluntad que
lucimiento en el tercio de banderillas del espada, que comenzó su faena de
muleta hincado de rodillas en el albero. Vanegas ejecutó buenas series
de muletazos, sobre todo con la mano derecha. Un bonito final por doblones
cerrando al toro parecía ser augurio de triunfo, pero el venezolano cobró una
estocada defectuosa y sólo saludó una ovación. En el segundo de su lote, Vanegas
volvió a dejar muletazos de buen gusto sobre ambas manos, pero a la faena
le faltó ligazón para adquirir más eco en los tendidos. Valiente arrimón final
del novillero con el astado aquerenciado en tablas, pero nuevamente el fallo
con el estoque le privó de tocar pelo.
Alberto
Escudero cortó una
oreja del quinto novillo de la tarde tras una faena de coraje y valor, en la
que llegó a ser volteado sin consecuencias. El espada charro dejó constancia de
su poder y buen hacer muleteril, sometiendo la embestida del astado de Antonio
Palla. Un estoconazo puso en sus manos el codiciado apéndice. También
pudo haber tocado pelo del primero de su lote, uno de los más deslucidos del
envío, pero en esta ocasión el fallo con el acero dejó el veredicto del público
en palmas.
El
triunfador del festejo fue Alejandro Marcos tras cortar tres orejas en
una tarde en la que se le vio maduro, capaz y muy solvente con dos novillos muy
diferentes. A su primero, noble y colaborador, le cortó una oreja tras una
faena pinturera y con muletazos de extraordinaria factura. Airoso en los
remates y con una personalidad muy marcada, conectó a la perfección con un
público que le espera. Cobró una estocada un tanto defectuosa y sólo paseó una
oreja. Dos apéndices paseó tras pasaportar al sexto del envío, el más serio y
peligroso de toda la tarde, que le prendió de forma escalofriante por el pecho
en el inicio del trasteo. Sin enmendarse, Alejandro Marcos volvió a la
cara del animal para, a base de tesón y valor, extraer meritorias series de
muletazos por ambas manos, poniendo el ¡uy! en boca de los espectadores
en más de una ocasión. No podía dejar escapar el triunfo el espada charro tras
el gran esfuerzo realizado y se volcó literalmente sobre el morrillo del astado
para dejar una estocada en todo lo alto que puso en sus manos el doble trofeo
que le abría la Puerta Grande del coso ledesmino.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de
Toros de Ledesma (Salamanca). Media entrada en tarde nublada y fresca. Se
lidiaron novillos de Antonio Palla, bien presentados y de diverso
juego, siendo el más peligroso el sexto. El resto, nobles.
Manolo
Vanegas (grana y
oro): ovación con saludos en ambos.
Alberto
Escudero (azul
marino y oro): palmas tras aviso y oreja.
Alejandro
Marcos (grana y
oro): oreja y dos orejas. Salió a hombros.
