José
Miguel Parra, apura recuperación después del percance en la última corrida de la Feria de Tovar, para
reaparecer este domingo en Zea. Foto: Aníbal García Soteldo
Rubén Darío Villafraz. La población de Zea Estado Mérida Venezuela, ubicada en lo que corresponde el Parque
Nacional General Juan Pablo Peñaloza -conocidos como los paramos de La Negra y El Batallón-, y el
cual geográficamente pertenece a la subregión del Valle del Mocotíes, lleva por
identificación el apellido del prócer de la independencia, colombiano, Francisco
Antonio Zea, botánico, teólogo, filósofo, y subversivo al gobierno español, el
cual acompañó filas de Bolívar en la carrera libertadora.
Y en el apartado taurino, siempre ha
sido un poblado de inexcusable afición, que en su momento tuvo como exponente y
orgullo al diestro Leonardo Coronado. Fue Coronado un torero que brilló siempre
y cuando los serios percances le respetaron, y cubrió un buen trecho de
identidad a todos los habitantes de la Sultana del Mocotíes, en el gusto y predilección.
Es Don Leonardo Coronado, ya un poco
alejado de los ruedos, el empresario de la corrida de toros de la Feria de la Virgen de Las Mercedes, que
este domingo tendrá lugar en la plaza de su propiedad, que bien vale la pena señalar,
se ha encargado de sembrar los últimos años, afición por toda la zona Sur del
Lago.
El cartel más que interesante, a razón
de las ambiciones de triunfo que se podrán observar en el ruedo. Se trata de
los matadores Rafael Orellana y José Miguel Parra, quienes junto a los
novilleros; Cristian Valencia, de la
capital carabobeña; Pedro Fortuol, de San Cristóbal, el mexicano Efrén Rosales y César Joaquín Parra de Maracay espadas todos en su conjunto quienes
despacharán reses de distintas ganaderías, a saber ya confirmadas, de
Campolargo, El Rocío y La
Punta.
José
Miguel Parra, apura recuperación después del percance en la última corrida de la Feria de Tovar, para
reaparecer este domingo en Zea. Foto: Aníbal García Soteldo
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