domingo, enero 27, 2013

Majestuoso Pablo Hermoso y aclamada vuelta al ruedo de Orellana

Arrimón del Venezolano Rafael Orellana que  perdió las orejas al pinchar el quinto.


Homero Duarte Corona..Pablo Hermoso de Mendoza en una segunda tarde de apoteosis en la Monumental Plaza de Toros de Pueblo Nuevo. Llevó al éxtasis a los tendidos, respaldado por un toro noble, de recorrido y con raza, “Tinajero”, del hierro de Rancho Grande y con peso en la balanza de 455 kilogramos.
El sexto de la tarde-noche y segundo de su lote, con el que armó la grande, un recital de buen toreo a caballo, una pintura de rejoneo, respaldado por un astado bravo, al que le colocó banderillas largas, luego de soberbias galopadas de costado con cada uno de los corceles con los que enseñó su talento y arte.
Después de colocar las tres banderillas cortas y con el toro agotado ante la larga faena, se fue a las tablas, sin que los auxiliares de Pablo Hermoso pudieran sacarlo a los medios para la hora suprema. En un momento de inspiración y sabiduría, prácticamente por una hendija colocó el rejón de muerte para enviar al noble toro al más allá sin puntilla y de inmediato traer la locura en los tendidos al grito de torero, torero y batiendo miles de pañuelos blancos.
No dudó la presidencia en otorgarle las dos orejas y vuelta lenta al ruedo a “Tinajero” por su nobleza y bravura. Pablo Hermoso se compenetró con el soberano, en medio de la apoteosis paseó el redondel y luego fue sacado a hombros por la puerta grande, segunda salida en 72 horas en la emblemática plaza de toros de Pueblo Nuevo.
Una tercera tarde de feria en la que, previo al cierre de ensueño de Pablo Hermoso de Mendoza, había pasado de todo, con una entrega y ganas de agradar, colocando la carne en el asador el debutante español Javier Castaño, dos buenas faenas en ambos toros, pero sin suerte en el instante de entrar a matar, sendos pinchazos que lo privaron de por lo menos una oreja en cada toro. Aviso y aviso.
En la misma onda el tovareño Rafael Orellana, que vino a mostrarse en Pueblo Nuevo, dejó sentado todo su sacrificio y ganas de agradar, con un primer toro de su lote muy complicado, al que tuvo que despacharlo muy rápido luego de una voltereta; en el segundo cuajó una buena faena, excelente trabajo con la muleta: expuso, se arrimó al toro con pases ceñidos, pese a la dificultad del animal. Un pinchazo, acertó en el segundo intento, pero una estocada trasera. Recibió un aviso. Vuelta al ruedo por todo su sacrificio y buen trabajo con la pañosa.

1 comentario:

  1. Deberian ponerle credito a las fotos porque seria un plagio lo que ustedes estan haciendo en su blog...Buenas noches

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